Ocurre algo similar a lo que pasa con iPhone y Android, donde el primero ahora es más fácil de hackear porque es más sencillo encontrar vulnerabilidades en él que en Android. Mientras que Apple ha conseguido poner a raya el malware, no lo ha conseguido con el adware y los programas potencialmente no deseados (PUP).

De hecho, mientras que en macOS la cifra ha aumentado considerablemente, en Windows el número de detecciones cayó un 2% en el caso de los ordenadores para consumidores. Donde sí aumentaron bastante fue en el caso de las empresas, donde las detecciones aumentaron un 13%. Esto demuestra que los hackers buscan atacar sobre todo a empresas más que a usuarios particulares, ya que un ataque exitoso en una empresa es mucho más rentable.

Las dos principales amenazas de macOS han sido NewTab y PCVARK. NewTab busca modificar las webs que visita el usuario, donde si escribimos por ejemplo la web de nuestro banco con Safari, en realidad estamos visitando otra web controlada por el hacker para robar nuestros datos. También se descubrieron amenazas que consiguieron robar dinero de Coinbase de usuarios de macOS. Estas amenazas, por suerte para los usuarios de Apple, no son tan peligrosas como puede ser un ransomware en Windows, aunque sí suponen el caso más grave de infección desde los problemas que macOS tuvo con Java en 2012. En aquel entonces, Apple lo solucionó eliminando por completo el soporte para Java.

Para 2020, se anticipa que vamos a ver un aumento en los ataques de ransomware, donde habrá ataques híbridos que se vayan realizando en varias etapas para ir aumentando su presencia en el dispositivo o redes infectadas, y la compañía afirma que “los usuarios de macOS no pueden decir ya que su sistema operativo es inmune